Si piensas que estoy loco por querer explicarte en un solo post como idear, prototipar y testar de una manera práctica en el Design Thinking, tienes toda la razón.
Estas tres fases son bien complejas, ahora bien he escrito ya otros muchos artículos sobre estas fases así que básicamente desde aquí te contaré lo básico y te dirigiré a otras partes del blog para que profundices.
Si no sabes muy bien que es el design thinking, mejor léete primero este artículo, o si quieres conocer el potencial del design thinking léete este otro.
¿Qué es idear?
Es una fase del Design Thinking de gran importancia, donde vas a obtener las ideas. Mucha gente empieza a trabajar por esta fase, y precisamente por eso fracasan tantos proyectos. Ya que llegar a ella sin haber trabajado la empatía y haber definido bien el problema es un profundo error.
Pero si realizas una explosión de ideas después de haber definido tu problema, tienes mucho ganado.
¿Por qué idear?
Ideas para encontrar soluciones para tus usuarios:
- Dando un paso más allá de las soluciones obvias y explotando el potencial de innovación de las soluciones.
- Incluyendo perspectivas colectivas de todo el equipo.
- Descubriendo áreas de exploración inesperadas.
- Creando un gran volumen e ideas variadas para tus posibilidades de innovación
Cómo idear
Para esta fase debes dominar a fondo el Brain Storming, no es que sea una disciplina difícil, pero hay que saber para sacarle el potencial. No hay peor forma de perder el tiempo que ponerte a hacer una lluvia de ideas con un grupo sin ninguna directriz.
Para hacerte un experto en estos temas te recomiendo los siguientes artículos:
- Lo básico del brain storming en este post
- Cómo dirigir una sesión de ideación
- Los importantísimos 10 mandamientos del brain storming
- Técnicas de brain storming primera parte y segunda parte.
¿Qué es prototipar y testar?
Prototipar es obtener ideas del mundo físico. Si las primeras fases son más bien teóricas aquí empezamos a poner sobre la realidad las ideas seleccionadas.
Los primeros prototipos deben ser rápidos y estar dirigidos a probar las hipótesis o asunciones primarias de tu idea.
Por ejemplo tus primera asunción es que había un usuario que tenía una necesidad y que tú idea podía resolverla. Con un prototipo rápido puedes probar con el usuario si realmente tenía esa necesidad y si realmente está dispuesto a adoptar la solución que has planteado.
Y testar es precisamente eso, ir comprobando si tu prototipo atiende a las necesidades del usuario, analizando cómo, por qué y las posibilidades de mejora.
¿Por qué prototipar y testar?
Prototipar y testar son fases claves del proceso porque:
- Permiten no invertir grandes esfuerzos en ideas que los usuarios no están dispuestos a adoptar.
- Nos enfrentan con los problemas reales y prácticos de nuestras ideas.
- Nos ayudan a tomar decisiones.
Cómo prototipar y testar
Es muy importante entender que prototipar es un proceso iterativo (cíclico). Hacemos un prototipo y lo testamos y de vuelta a prototipar.
En las primeras aproximaciones debemos hacer prototipos rápidos e incluso cutres si es preciso. Lo importante es ir validando las posibilidades de la idea y mejorar el prototipo según vayamos aprendiendo.
Para testar debemos seguir una metodología básica.
- Utilizar una muestra suficientemente grande y variada del público objetivo.
- Diseñar test que no estén sesgados (por ejemplo si preguntas: ¿a que te gusta mucho este prototipo que nos ha costado tanto tiempo hacer y que hemos diseñado especialmente para ti? No creo que obtengas respuestas muy objetivas.
Lo normal es prototipar una prueba de concepto para iniciar. Sería poner a prueba lo básico de la idea y responder a tres preguntas.
- ¿Existe el usuario realmente?
- ¿Existe la necesidad y el insight es correcto?
- ¿Tu idea resuelve el problema del usuario y está predispuesto a adoptarla?
Los diferentes tipos de prototipos que puedes utilizar son
- Elevator Pitch: lo más sencillo de todo, te preparas la idea y se la cuentas a los usuarios. Utiliza el feedback para mejorar.
- Spot publicitario o folleto: realizar publicidad como si el servicio, producto estuviese acabado y mostrársela a los clientes potenciales. En ocasiones puede incluir pruebas de venta o uso, para ver si los usuarios están realmente dispuesto a apostar por tu solución.
- Story Board y/o Blue print: muy adecuado para servicios, te permite mostrarlo secuencialmente y analizar todos los puntos críticos del mismo.
- Servicio o proceso simulado: es un story board llevado a la realidad. Por ejemplo si estás ideando un servicio realizas un rol play, en el que uno de los miembros del equipo, será un cliente, otro el tendero, etc.
- Talleres de co-creación: se realiza una construcción del prototipo junto a los usuarios. Es una metodología muy interesante, que te sirve para ver como interacciona el usuario con los diferentes elementos de la solución y el problema.
- Construcción de prototipos: lo que viene siendo ponerse manos a la obra, podemos empezar con diseños, maquetas a pequeña escala, maquetas a tamaño real y prototipos con diferentes niveles de acabado.
Una de las estrategias que más claramente habla del prototipado el testeo es el Lean Startup, en este artículo puedes encontrar un resumen.